industria automotriz.
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NO, a la movilidad eléctrica? No, al auto eléctrico a batería??
La industria tradicional automotriz nació simultáneamente con la industria del petróleo. Es más, a lo largo de cien años una fue realimentando a la otra. Si bien la industria del petróleo se diversificó con la petroquímica, dado que del mismo se obtienen una cantidad de elementos que actualmente hacen a la vida diaria, cuando se habla de petróleo inmediatamente se lo asocia con el uso en transporte a través de los combustibles para los motores de combustión interna (MCI).
Este reinado secular junto a los negocios cruzados que de ellos se desprende hace que naturalmente se trate de mitigar cualquier intento de modificación del status quo de motorización, aun sabiendo con toda certeza que la situación actual medio ambiental y energética pone a los MCI como responsable de la generación mundial del 40% de los gases de efecto invernadero. Y un derroche de energía alarmante a tenor del 30 o 40 % de rendimiento de los motores aludidos. Es decir, menos de la mitad de una unidad de combustible líquido se utiliza para mover un móvil el resto se disipa al medio ambiente en forma de calor.
Dentro de este contexto, analicemos el siguiente hecho histórico:
Hacia 1990 la contaminación del aire de California (USA) era peor que la suma del resto de 49 estados de Estados Unidos. Por lo que la California Air Resources Board (CARB) promulgó una gran iniciativa medioambiental que obligaba a cada uno de los 7 grandes fabricantes de coches a fabricar el 2% de su producción como vehículos de emisiones cero (ZEV) para 1998, 5% para 2001 y 10% para 2003 si querían seguir vendiendo sus coches en California.
La producción del EV1 se sucedió de 1996 a 1999, siendo el primer coche eléctrico diseñado como tal y fabricado en serie. El diseño partía de un concepto de coche eléctrico que General Motors (GM) ideó en 1990 y se fabricaron un total 1.100 unidades aproximadamente. Su producción se interrumpió en 1999, y todos los vehículos en uso fueron retirados del mercado entre 2003 y 2004. La mayoría de los 1.117 vehículos fabricados fueron retirados de sus propietarios y destruidos por la propia GM.
También Toyota puso a la venta o alquiló en régimen de leasing más de 1.500 unidades del RAV4 EV (eléctrica), desde 1997 hasta 2003 en el estado de California.
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Ese mismo año, para justificar la destrucción del vehículo eléctrico, el presidente George Bush (Jr) dijo: "La próxima generación de automóviles puede ayudarnos a cambiar el mundo". Con estas palabras volvía a alabar las virtudes del hidrógeno como método de propulsión, "la receta perfecta contra la dependencia energética y la contaminación", según el dirigente norteamericano. (Febrero 2003- https://www.autopista.es/)
Muy poco tiempo después nos dimos cuenta que todo era un truco de magia en que la industria tradicional prometía un cambio de tecnología, en este caso del hidrógeno, solamente para justificar el desastre realizado con los eléctricos y hacer olvidar la "aventura eléctrica".
Pero el sol no se puede tapar con las manos y en ese mismo año (2003) Tesla Motors se fundó por parte de un grupo de ingenieros que querían probar que la gente no tenía que realizar concesiones para poseer vehículos eléctricos. Dando como resultado la presentación oficial del Tesla Roadster, un automóvil deportivo totalmente eléctrico, el 19 de julio de 2006, por parte de su CEO, Elon Musk.
Otras empresas del mundo automotor por esa época probaban suerte con modelos netamente de ciudad, por ejemplo, el Mitsubishi i MiEV. Hasta que la empresa Nissan presenta en 2010 el modelo LEAF, un sedán eléctrico apto para ruta. El LEAF se convirtió en el primer coche eléctrico en llegar a las 400.000 unidades vendidas. Los autos vendidos hasta la fecha han recorrido más de 10.000 millones de kilómetros, lo suficiente para ahorrar unos 3,8 millones de barriles de petróleo al año.
En la actualidad debido al esfuerzo sostenido de Tesla Motors de incorporar vehículos de calle eléctricos y de la República Popular China en adoptar los vehículos eléctricos como consecuencia de la espantosa intoxicación del aire en sus ciudades, es que la movilidad eléctrica va tomando cierto ritmo de incorporación.
Pero la pregunta es, porque las grandes automotrices tradicionales se resisten a modificar el paradigma de motorización??? Porque la mayor empresa automotriz del mundo Toyota Motor Corporation, por ejemplo, con sobrada tecnología y respaldo empresarial no lidera el cambio????
La respuesta a las preguntas tardó en llegar pero a través de la honestidad nipona se nos acerca de la mano del presidente de Toyota en una entrevista otorgada al The Wall Street Journal (17/12/20 - https://www.wsj.com/articles/toyotas-chief-says-electric-vehicles-are-overhyped-11608196665). En la misma Aki Toyoda expone su pensamiento y el de la empresa en referencia a la movilidad eléctrica:
"El CEO de Toyota dice que los vehículos eléctricos están sobrevalorados"
"Akio Toyoda dice que la conversión completa a vehículos eléctricos podría costar cientos de miles de millones de dólares y hacer que los autos sean inaccesibles para la gente promedio"
"«el sistema colapsará» si el Gobierno japonés finalmente pone en marcha el plan con el que el país del sol naciente pretende poner fin a los coches con motor de combustión interna entre 2035 y 2050"
"Critica especialmente a los que apoyan al coche eléctrico desvirtuando la sostenibilidad de esta tecnología, a la que acusa de no considerar las emisiones de CO2 producidas por la generación de energía eléctrica"
"Pero la parte más dura de su mensaje fue una amenaza directa a los políticos y a la economía de su país mostrando un escenario apocalíptico, al afirmar que si se prohíben los coches a gasolina todo se derrumbará"
"El modelo de negocio actual de la industria automotriz se derrumbará", provocando con ello la pérdida de millones de puestos de trabajo"
"Toyoda afirma que «cuantos más coches eléctricos se produzcan más subirá el CO2«"
Una mirada apocalíptica, excesivamente conservadora que puede llegar a que una empresa de esta magnitud quede rezagada con respecto a otras, por ejemplo, Volkwagen que viene realizando una enorme apuesta por el coche eléctrico.
El CEO de Volkswagen cuenta que el grupo ha destronado a Toyota como primer fabricante del mundo de automóviles. Herbert Diess ha declarado que el coche eléctrico no iba a tener una repercusión en términos de puestos de trabajo, como la que imaginaban al principio.
En definitiva, es muy probable que puertas adentro los jerárquicos de la industria automotriz tradicional piensen lo mismo que el Sr. Toyoda, y es más quizás no quieran ni oír de los vehículos eléctricos, no observando la tendencia progresiva hacia la electrificación.
Mientras tanto, una vez más, vuelve a aparecer como la panacea energética/medio ambiental los vehículos que utilizan hidrógeno. Los cuales tienen un rendimiento mucho menor que un vehículo eléctrico a batería y paradójicamente (¿?) hoy en día el hidrógeno que se utiliza es provisto por las petroleras ya que para grandes volúmenes y bajo costo se obtiene del gas metano.
Será que la historia se volverá a repetir como en el 2003? Creo que en esta oportunidad, no hay chance.
Ing. Ricardo Berizzo 2020.-
Cátedra: Movilidad Eléctrica
U.T.N. Regional Rosario
